El patrimonio de Huelva va más allá de monumentos. Sus espectaculares paisajes, parajes, gastronomía y su gente hacen de la provincia onubense un auténtico lujo para todos los sentidos. La Sierra es quizás una de las grandes desconocidas para aquellos turistas que llegan a Huelva para disfrutar de sus playas, pero es uno de los grandes descubrimientos y ‘enamoramientos’ de todos los que acaban disfrutándola. 

El parque natural de Sierra de Aracena y Picos de Aroche merece un post exclusivo porque sus magníficos tesoros son dignos de ser disfrutados por todos. Su paisaje de montañas suaves se ve salpicado por decenas de dehesas y bosques de castaños, encinas, alcornoques… Un placer para los sentidos.

Si no sabes por cuál de sus 28 pueblos y aldeas comenzar, déjate llevar por las rutas, caminos y carreteras que unen los mismos. Sus espectaculares paisajes, colores, olores y paradas en el camino provocarán que te enamores de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche. 

Pasear por sus amplias dehesas, aprender sobre la cría del cerdo ibérico, alrededor de la cual se ha levantado una industria que sustenta la economía de pueblos como el de Cumbres Mayores o Jabugo. Aprovechar las paradas para deleitar el paladar con sus exquisitos embutidos y, por supuesto, su jamón con Denominación de Origen Huelva.

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Su variedad forestal proporciona, a su vez, una curiosa fauna que te acompañará en tu visita. En el interior del parque (para las rutas más expertas), podrás observar mamíferos como el la nutria, la jineta o el meloncillo. Si te sorprenden las aves, no dejes de mirar al cielo y a las copas de los árboles porque encontrarás desde milanos, buitres, águilas o incluso cigüeñas negras.

¿Y a quién no le apetece aprender sobre historia con el interesante patrimonio de sus pueblos? Es una cita ineludible poder pasear por el conjunto monumental de Almonaster la Real, compuesto por el castillo, la iglesia y la mezquita; el castillo de Cortegana, uno de los mejores conservados de la zona o la fortaleza de Sancho IV en Cumbres Mayores. Sin olvidarse de la Gruta de las Maravillas en Aracena o la Peña de Arias Montano en Alájar. 

¿Para cerrar una visita espectacular a los parajes serranos? Su gastronomía. Desde el desayuno a la cena. La región ofrece también una variada oferta gastronómica, como es su conocidísimo jamón y embutidos serranos, pasando por las carnes de caza, queso de cabra, chacinas varias y, por supuesto, la castaña y las setas. 

Déjate perder por los sentidos y embriágate por la Sierra de Huelva.

Existen pequeños paraísos culinarios en la Sierra de Aracena y Picos de Aroche que bien valen repetir cada día una ruta gastronómica por esta zona. No solo del jamón vive la zona, pero es quizás uno de los ingredientes principales en muchos de los platos delicatessen que podemos disfrutar en cualquier restaurante o bar de la zona. Pero como decimos, muchos más productos deleitan los paladares en la Sierra onubense. 

No solo del jamón vive la zona. Muchos más productos deleitan los paladares en la Sierra onubense

Merece la pena desplazarse a disfrutar del aire puro y fresco serrano para ir haciendo paradas gastronómicas a lo largo de la ruta. Bares como El Manzano o José Vicente en Aracena, Casas, que según The Guardian es el mejor en el que comer jamón; el Mesón Arrieros en Linares de la Sierra; pastelerías míticas como Rufino en Aracena, que ha sido tanto su éxito y su clientela que ha abierto un local en la capital sevillana por ejemplo… Y así hasta decenas y decenas de nombres propios que todos conocemos. 

Ruta gastronomica Sierra Huelva

Pero, ¿una ruta gastronómica por la Sierra sin nombres concretos? También es posible, y recomendable del mismo modo. Cualquier establecimiento de restauración de la zona elabora platos típicos con productos autóctonos que harán de tu visita un deleite para los sentidos. Y si esta visita la haces en época de frío, el exquisito olor del jamón y las setas se mezclarán con el inconfundible de chimenea, que da un toque diferente a cada comida. 

Y si esta visita la haces en época de frío, el exquisito olor del jamón y las setas se mezclarán con el inconfundible de chimenea, que da un toque diferente a cada comida

Productos del cerdo, setas, quesos artesanales, verduras y hortalizas de las que te recuerdan a tu niñez y los sabores que nunca olvidas y sigues buscando en los mercados… La Sierra onubense te ofrece sabores para todos los gustos. ¡Incluso los de la Costa! Muchos de los restaurantes de la zona ofrecen pescado fresco del día gracias a la cercanía con la costa onubense. 

También puedes pedir los vinos de la zona, o en otoño la época de los primeros mostos. Líquidos que maridan perfectamente con los sabores de los platos serranos. 

Y para concluir una ruta gastronómica, ¿qué mejor que un dulce? No solo puedes escoger cualquiera de los de Rufino o las pastelerías de la zona (todas exquisitas), sino que muchos establecimientos te ofrecerán postres caseros. Entre ellos destacaría la poleá, una comida tosca que los pastores preparaban con harina de almorta y que se ha transformado en un postre delicioso a base de harina de bellota dulce, anís y matalahúva. 

¿Aún dudas qué hacer este fin de semana? Escápate a la Sierra que seguro que no olvidarás sus sabores y volverás pronto.